Tabárez-Cúper, un duelo de viejos conocidos. El seleccionado uruguayo se apoya en su dupla de ataque, de primer nivel. Salah está "casi confirmado" para ser de la partida, según palabras de su propio entrenador.
EKATERIMBURGO, Rusia.- Con el mote de favorito y con una dupla atacante temible, Uruguay recibirá desde las 9 (hora argentina) a un Egipto que, conducido por el argentino Héctor Cúper y con la presencia estelar de Mohamed Salah, asoma como una seria amenaza. El partido, en Ekaterimburgo, completará la fecha inicial del Grupo A del Mundial, tras la goleada de Rusia sobre Arabia Saudita (5-0) en la jornada inaugural.
Uruguay tiene el desafío de quebrar su historia y empezar con el pie derecho su camino mundialista. En Brasil una sorpresiva derrota inicial ante Costa Rica puso a prueba al equipo, situación que no quieren repetir en Rusia.
Un triunfo ante los africanos afirmaría las sensaciones de un equipo sudamericano que, sin ser uno de los grandes candidatos al título, admite que tiene armas para soñar en una Copa del Mundo que emule o supere su andar en Sudáfrica, donde alcanzó el cuarto puesto, también con Tabárez como director.
La selección uruguaya tiene en el banco al entrenador más longevo del torneo con 71 años, experimentados en ataque y defensa y un mediocampo que respira juventud.
Tabárez abrió las puertas a la renovación y jugadores como Matías Vecino, Rodrigo Bentacur y Giorgian De Arrascaeta, más propensos al toque y la creación que sus antecesores, sumando más juego corto y posibilidades de pases en profundidad para la dupla de ataque.
Todo eso sin perder el equilibrio y la mística de equipo de sacrificio que marcan su historia.
A cuatro años de salir del Mundial de Brasil por la puerta de atrás, por una mordida al italiano Giorgio Chiellini que desató una tempestad, Suárez está dispuesto a que Rusia sea su Mundial.
El delantero de Barcelona llega en forma y acompañado en el ataque de un Cavani que ostenta el cartel de goleador de la liga francesa con el París Saint Germain.
En Egipto, todos los caminos conducen a Salah. Su caída en la final de la Champions League por una lesión de hombro cortó el aliento de todo el seleccionado dirigido por Cúper, quien ayer admitió que la figura del Liverpool tiene grandes chances de ser de la partida.
Salah -cumplirá hoy 26 años- encendió a los 100 millones de egipcios el miércoles cuando se sumó al equipo en la jornada pasada de entrenamiento en Grozni.
El duelo marcará el choque de dos viejos conocidos en la dirección técnica. Tabárez en su cuarto Mundial con Uruguay, el tercero consecutivo, medirá fuerzas con Cúper, otro amante del sacrificio y el orden defensivo. Dos veteranos convencidos de que para ganar hay que limitar las virtudes del rival.
Siguiendo esa lógica, la presencia o no del goleador del Liverpool inglés -que anotó más de 40 goles con su equipo la pasada temporada- podría generar movimientos en el mediocampo de Uruguay.